Christian Menda: la actividad ilícita con criptomonedas alcanza niveles históricos debido a las sanciones y el hackeo
Christian Menda, Responsable sector privado en Chainalysis Iberia
Como cada año, en Chainalysis hemos publicado nuestro informe sobre Cripto Delincuencia, que explora las últimas tendencias con respecto a la actividad ilícita que se realiza en el blockchain. Tras cinco años consecutivos, volvemos a poner el foco en las transacciones irregulares que han afectado al mercado de las criptomonedas como, por ejemplo, cuáles han sido los hackeos o estafas más comunes, así como las principales acciones de manipulación de mercados.
A pesar de la recesión en el mercado de criptomonedas, el valor absoluto de transacciones ilícitas aumentó por segundo año consecutivo en términos generales, alcanzando un máximo histórico de al menos 20.100 millones de dólares en 2022. La principal razón de este incremento nos lleva a un punto concreto del mapa: Rusia. Allí se realizaron un gran volumen de intercambios de criptomonedas, que supusieron un aumento de más de 10 mil millones entre 2021 y 2022, lo que representa la mayor parte (44%) de todo el volumen de transacciones ilícitas durante el año pasado.
Si hacemos foco en el apartado de hackeo de criptomonedas, en 2022 se robaron 3.800 millones de dólares, principalmente de protocolos DeFi y por atacantes de Corea del Norte. Aunque los periodos de hackeo tuvieron altibajos a lo largo del año, marzo y octubre fueron los meses de mayor pico de actividad. En concreto, octubre fue el mes en el que se produjo el mayor hacking de criptomonedas de la historia, con 775,7 millones de dólares robados en 32 ataques distintos.
Los protocolos DeFi representaron el 82.1% de todas las criptomonedas robadas por hackers, un total de 3.100 millones de dólares, frente al 73.3% en 2021. Y de esos 3.100 millones de dólares, el 64 % procedía específicamente de protocolos de puentes entre cadenas. En concreto, hablamos de protocolos que permiten a los usuarios transportar sus criptomonedas de una cadena de bloques a otra. Estos puentes son un objetivo muy interesante para los hackers, ya que los contratos inteligentes se convierten en enormes depósitos centralizados de fondos que respaldan los activos que se han transferido a la nueva cadena. Si un puente crece lo suficiente, es casi seguro que cualquier error en el código de su contrato inteligente u otro punto débil potencial acabará siendo encontrado y explotado por los delincuentes.
Sin embargo, el Crypto Crime Report de Chainalysis demuestra que las transacciones asociadas con delitos tradicionales como estafas, fraudes o incluso la financiación del terrorismo han disminuido con respecto a 2021.
Podemos confirmar que las diez principales estafas de 2022 fueron estafas de inversión, y sólo los volúmenes de transacciones relacionados con fondos robados aumentaron un 7 % con respecto al año pasado, que incluso fue un crecimiento menor en comparación con el año anterior. En general, la actividad ilícita en criptomonedas es pequeña: solo el 0,24% del volumen total de transacciones.
Por último, la manipulación de mercado es excepcionalmente destructiva en el mundo de las criptomonedas, debido a la facilidad con la que se pueden lanzar nuevos tokens y el ruido asociado en redes sociales u otras conversaciones sobre inversiones en criptomonedas. Muchos creen que la criptomoneda se está acercando a un punto de inflexión que podría provocar una adopción masiva por todo tipo de públicos. Pero para ello deben evitarse estas malas prácticas de manipulación de mercados que, sin duda, se aprovechan de los recién llegados. De los 40.521 tokens lanzados en 2022 que ganaron suficiente tracción para ser analizados, el 24% sufrió una caída de precio en la primera semana, lo que indica una posible actividad de este tipo. El creador de tokens más prolífico que se ha identificado -de acuerdo con nuestros criterios- lanzó 264 tokens en 2022 utilizando esta estrategia.
En Chainalysis trabajamos constantemente con nuestros socios en los sectores público y privado para investigar todo este tipo de actividades. Estamos allanando el camino para una economía global basada en cadenas de bloques, y por eso, acompañamos a las empresas, los bancos y los gobiernos en su toma de decisiones, en fomentar la innovación y la protección a los clientes. Nuestro objetivo es construir un ecosistema más seguro en el futuro. A medida que se transfiera más y más valor a la cadena de bloques, todos los riesgos potenciales se volverán transparentes y tendremos una visibilidad más completa.