La Universidad de Princeton lanza una iniciativa para estudiar el potencial del Blockchain en la redistribución del poder en la sociedad.

Para esta iniciativa, la campaña Venture Forward de Princeton recibió 20 M$ en donaciones de ex alumnos, como Peter Bridger, de Fortress Investment; el cofundador de Ethereum, Joseph Lubin; el CEO de Pantera Capital, Daniel Morehead; y Mike Novogratz, de Galaxy Digital.

Con la aportación de cuatro ex alumnos de primer nivel, la Universidad de Princeton ha anunciado la puesta en marcha de un estudio de investigación liderado por académicos de todas las disciplinas y cuyo objetivo principal es comprender mejor las posibilidades que ofrece la tecnología ‘block’.

La llegada de las criptomonedas ha supuesto una nueva revolución tecnológica que se suma a otras anteriores como fueron la imprenta o el internet. Cada nueva oleada ha propiciado profundos cambios en la distribución del poder político y económico en la sociedad. La pregunta que ahora todos nos hacemos es: ¿qué cambios va a suponer en el orden tal como lo conocemos actualmente? La incertidumbre es generalizada a todos los expertos si partimos de la premisa que la tecnología blockchain no opera bajo un control central, lo que abre la posibilidad de innovaciones y cambios sociales significativos, incluyendo nuevos tipos de contratos y plataformas de comunicación. Pero vayamos por partes.

La Universidad de Princeton ha puesto en marcha este proyecto con el propósito de responder a ésta y otras muchas preguntas. Dar luz a muchas de las incertidumbres que rondan los expertos en la materia y ver de qué manera esta nueva tecnología puede cambiar el mundo. Para ello, el proyecto se llevará a cabo en la Escuela de Ingeniería y Ciencias Aplicadas e involucrará a académicos de las ciencias sociales, políticas, economía y humanidades.

Blockchain está ya aquí y sin embargo es todavía un gran desconocido para gran parte de la sociedad. Estudiar la tecnología y marcar las bases de su aprendizaje es uno de los mayores propósitos de los académicos. La Universidad de Princeton tiene ahora una oportunidad de oro para liderar un estudio que podría dar luz a algunas de las grandes dudas que suscita el universo block. Una tecnología que algunos expertos ya la han adoptado como la nueva generación de internet, conocida como Web3, en la que los usuarios dispares no solo generan contenido, como publicaciones en redes sociales, sino que también poseen y administran las plataformas de distribución.

Para Joseph M. Lubin, cofundador de la plataforma Ethereum y uno de los ex alumnos que han participado en esta primera financiación, ha destacado cómo el principal objetivo de la donación es involucrar la fuerza de la universidad Princeton no solo en ingeniería sino también en ciencias sociales: «Es una tecnología muy poderosa que tiene el poder de transformar el modelo económico y social de internet tal como lo conocemos. Nuestra comprensión colectiva de los beneficios y los inconvenientes de la tecnología digital ha avanzado mucho en las últimas dos décadas de innovación digital. El surgimiento de Web3 presenta una oportunidad para que las sociedades hagan un balance colectivo y evalúen cómo esta nueva era de innovación digital puede servir mejor a sus ciudadanos.»

Los expertos de este proyecto de investigación confirman también la necesidad de asociarse con entidades externas, incluidas empresas de tecnología, para conocer mejor esta tecnología e introducir innovaciones en el mercado.